El Cádiz CF cerró la temporada 2024-25 de manera decepcionante, al caer derrotado el pasado domingo en el estadio del Oviedo. Este resultado dejó al equipo en la 13ª posición de la tabla, un lugar que refleja un curso que estuvo marcado por altibajos, donde las expectativas no se cumplieron. Con este capítulo cerrado, la entidad cadista se enfrenta a la importante tarea de planificar la próxima campaña 2025-26, en la que nuevamente competirá en la Segunda División.
Desde la dirección del club, hay un consenso claro: es necesario realizar cambios en la plantilla. Así, el lunes siguiente a la finalización de la Liga, el Cádiz CF comunicó a seis jugadores que no cuentan con ellos para la próxima temporada y les instó a buscar nuevos destinos, tal como informó Ángel García desde Cazurreando. Los futbolistas afectados son el portero José Antonio Caro, el defensa central Fali, los centrocampistas Rubén Alcaraz y Gonzalo Escalante, y los atacantes Brian Ocampo y Rubén Sobrino.
Sin embargo, la respuesta de los jugadores fue contundente: todos ellos poseen contrato vigente y, en caso de que el club desee su salida, exigirán el pago de sus finiquitos para poder salir libres. Esta situación refleja un momento de tensión y distanciamiento entre el club y los jugadores, quienes han dejado claro que, aunque se les pida que busquen nuevo equipo, se ciñen a los términos acordados en sus contratos.
Entre estos casos, destaca el de Fali. El central fue renovado apenas en diciembre hasta el 30 de junio de 2028, y ahora se encuentra en una situación complicada tras recibir la propuesta de salida del club. Su largo vínculo contractualmente lo convierte en un caso más difícil de manejar en comparación con los otros cinco futbolistas, quienes tienen contrato hasta 2026.
Cada uno de estos casos tendrá su particularidad y se resolverá con el tiempo. El verano es un periodo extenso en el mundo del fútbol, y muchas cosas pueden suceder antes de que cierre el mercado de fichajes a finales de agosto. La planificación de la nueva temporada ya ha comenzado, pero el camino hacia la reconstrucción de la plantilla no será fácil, y el Cádiz CF deberá abordar estos desafíos con astucia y determinación si quiere aspirar a mejores resultados en el futuro.





