Los vecinos de la plaza de Dr. Jaime San Narciso, ubicada en El Puerto de Santa María, se enfrentan a un problema que parece no tener solución: el ruido constante generado por las paradas de la línea 1 del transporte público. Esta situación, que afecta su calidad de vida, se ha prolongado desde hace años, con una denuncia formal ya publicada en octubre de 2020, sin que hasta la fecha el Ayuntamiento haya tomado concretas para mitigar el impacto acústico en la zona.
Desde las 7:30 de la mañana hasta las 23:30 de la noche, los habitantes de esta plaza sufren un bombardeo sonoro que les impide descansar adecuadamente. La contaminación acústica se ha convertido en un problema grave, afectando no sólo la paz del hogar, sino también la salud y el bienestar de quienes residen allí.
Uno de los principales factores que contribuyen a este desconcierto son las paradas de los vehículos de la línea 1, que frecuentemente guardan entre cinco y diez minutos antes de iniciar su siguiente recorrido. A pesar de la normativa que exige a los conductores apagar los motores si el tiempo de espera supera los tres minutos, muchos de ellos optan por dejar el motor encendido, incrementando la contaminación acústica en el área. Esta falta de cumplimiento agrava aún más la situación, dejando a los vecinos sin una solución viable.
La propuesta más lógica para aliviar este problema sería cambiar la ubicación de la parada de la línea 1. De esta manera, no solo se reduciría significativamente el ruido en la plaza, sino que también se fomentaría un ambiente más saludable para los residentes. Es fundamental que el Ayuntamiento escuche las inquietudes de los vecinos y actúe de forma efectiva para resolver una situación que, por desgracia, no es nueva, pero que sigue requiriendo atención urgente.
Los vecinos merecen poder disfrutar de sus hogares sin ser víctimas de la contaminación acústica. La acción inmediata por parte del Ayuntamiento podría marcar la diferencia en la calidad de vida de todos aquellos que habitan en esta emblemática plaza. Un cambio es posible, y es necesario que se haga realidad.
